Mi experiencia con las adicciones me ha llevado a explorar y a estudiar la complejidad y factores implicados en el tema. He aprendido que el consumo de sustancias y el alcohol (entre otros) es sólo punta del iceberg de un problema en los individuos. El resto del iceberg está compuesto por emociones irresueltas, etapas de vida y energía estancadas, traumas, formas de pensar dañinas, hábitos auto destructivos, situaciones familiares y temas de comunicación entre otros factores.

Una entrada efectiva para lograr la recuperación son los grupos de autoayuda; cuyo principal enfoque es el trabajar los 12 pasos que se ofrecen, la contención y ayuda comunitaria.

La experiencia con personas que van a grupos me ha mostrado que no todos logran profundizar en los aspectos físicos, mentales, emocionales y espirituales. He encontrado personas que han logrado dejar de consumir, pero que no consiguen modificar otras conductas autodestructivas.

He visto que las personas que más avanzan y prosperan en programas de recuperación son aquellas que buscan además del grupo, otras alternativas de sanación. Estas opciones pueden incluir tratamientos psicológicos, de nutrición, meditación, herramientas espirituales externas al programa de 12 pasos, retiros, etc. Hay muchas opciones que pueden llevar a los individuos a un autoconocimiento, expansión de la consciencia, y a lograr la paz que todos como individuos buscamos.

Hoy estoy comprometida en ayudar a quien quiera ir más allá de dejar de consumir sustancias. A explorar el origen del síntoma de la adicción, y a prosperar en su recuperación.